“Cuando creas que todo terminó, ese será el principio” (Anónimo)
Por las noticias nos vamos enterando que los médicos de todo el mundo van encontrando la pista de cómo tratar el virus que se convirtió en pandemia. Como dice la Dra. María Eugenia Barrientos del país de Honduras: “cada país debe emplear sus propios protocolos de atención con sus pacientes”, ella está compartiendo con el mundo sus conocimientos de medicina y atendiendo a pacientes vía video conferencia, logrando salvar la vida de muchas personas. Cuando le preguntaron cuanto cobraba contestó: “el tiempo de bonanza ya llegará, ahora se trata de ayudar, por eso no cobro…”, estas palabras calaron en mi admiración, porque a través de su trabajo está demostrando que los valores universales de los que tanto se habla, es una realidad que se puede practicar en el diario vivir.
Así como me entristeció tanto las consecuencias del virus cuando invadió Europa y tantos lugares del mundo, ahora me alegra saber que hay muchas personas recuperándose del mal, y otras tantas que brindan su trabajo incondicionalmente.
Esta situación nos recuerda a Darwin cuando dijo:…”en los cambios que la vida nos ofrece, sobrevive el que mejor se adapta a las nuevas situaciones”; sus estudios los realizó observando a los monos, pero lo generalizó a la especie humana, siendo un aporte para la teoría de la evolución, porque él creía que el hombre descendía del mono, ahora hay otras teorías, pero su planteamiento sobre la “adaptabilidad” de las especies sigue vigente y como sabemos, una verdad deja de ser cierta, cuando se demuestra otra verdad que la supera.
Aún no es el final, no hay final, porque la humanidad continúa y vamos por buen camino, entonces, conociendo la verdad científica que nos dejó Darwin, los que nos hemos librado del ataque del virus, por ahora, es porque nuestro organismo fue capaz de adaptarse, nos queda seguir adelante, con mucha responsabilidad y aplicando las tantas virtudes que nos caracteriza como seres humanos, ¡entre todos podremos!…Quiero resaltar la palabra “adaptación”, que según el diccionario es un proceso, relacionado con los cambios, que sucede para ajustar el equilibrio de, situaciones, cosas o eventos. Relacionado con el hombre diríamos, que es un proceso biológico, que sucede entre el organismo y el ambiente, gracias a este proceso es posible la supervivencia. La vida del planeta está en continuo cambio, nada es estático, y está demostrado también que las especies que se mantienen unidas en grupos, tienen más éxito para conseguir la adaptación; uno de los factores que facilitan este proceso se conoce como “apego “que es una vinculación afectiva intensa y que según el psicólogo John Bowlby (1907-1990)
Cumple dos funciones básicas, una función biológica que es la de protección para asegurar la supervivencia y otra es la función psicológica para adquirir seguridad, tan necesaria para favorecer la integración social del niño, por esta razón se aconseja compartir momentos en familia y una herramienta para llegar al niño es el juego, por eso hoy los invito a realizar en el arte del origami un mono, mientras les explican a los niños lo importante que es la manifestación de confianza y cariño entre la familia y poder luego ser extensivos a la sociedad.
“Lo que se les de a los niños, los niños darán a la sociedad” (Karl A. Menninger)
Materiales: Lámina de papel origami de 15x15cm y 1 rotulador negro
