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La primera sesión de coaching con un cliente es fundamental, ya que establece la base para una relación productiva y de confianza entre el coach y el coachee. A continuación, detallo los pasos que generalmente se siguen en una primera sesión de coaching, esto como profesional del coaching te ayudará como recuerdo de metodología y guía, ahora bien, si vas recibir una sesion de coaching como cliente te va a dar la tranquilidad de que es una metodología secuenciada, que pasa por:

Paso 1: Establecer Rapport

El primer paso es crear un ambiente de confianza y confort. Esto puede lograrse a través de una conversación amena y abierta, donde el coach muestra empatía, escucha activamente y se comunica de manera respetuosa y abierta. Establecer una buena relación es crucial para el éxito del proceso de coaching.

Paso 2: Explicar el Proceso de Coaching

El coach debe explicar cómo funciona el proceso de coaching, qué se puede esperar de él y qué no. Es importante clarificar el rol del coach y del coachee, así como los principios de confidencialidad que guiarán las sesiones. También es un buen momento para discutir la estructura típica de las sesiones futuras y la frecuencia de las mismas.

Paso 3: Definir los Objetivos del Coachee

Una parte esencial de la primera sesión es identificar y definir los objetivos que el coachee quiere alcanzar a través del coaching. El coach puede ayudar al cliente a formular objetivos claros, específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales (SMART). Es importante que estos objetivos sean determinados por el coachee, con el coach actuando como facilitador.

Paso 4: Evaluación Inicial

En algunos casos, el coach puede llevar a cabo una evaluación inicial para entender mejor el punto de partida del coachee. Esto puede incluir preguntas sobre la situación actual, desafíos específicos, fortalezas y áreas de mejora. Esta evaluación puede ser conversacional o puede involucrar cuestionarios específicos.

Paso 5: Establecer el Acuerdo de Coaching

Antes de proceder, es vital establecer un acuerdo formal de coaching. Este acuerdo debe incluir detalles como la duración del coaching, la frecuencia de las sesiones, los honorarios, los términos de cancelación y cualquier otro aspecto logístico relevante. Esto asegura que ambas partes tienen expectativas claras y entendidas.

Paso 6: Introducción a Herramientas y Técnicas

El coach puede introducir algunas de las herramientas y técnicas que se utilizarán durante las sesiones. Esto puede incluir métodos para mejorar la autoconciencia, técnicas de reflexión, ejercicios de visualización, entre otros. Presentar estas herramientas desde el inicio puede ayudar al coachee a sentirse más preparado y comprometido con el proceso.

Paso 7: Establecer la Tarea

Al final de la primera sesión, es común que el coach asigne alguna tarea que el coachee debe realizar antes de la próxima sesión. Esta tarea puede estar relacionada con la reflexión sobre los objetivos definidos, la observación de ciertos comportamientos o la preparación de un diario de logros y desafíos.

Paso 8: Cierre de la Sesión

Finaliza la sesión revisando los puntos clave discutidos, clarificando cualquier duda y confirmando la fecha y hora de la próxima sesión. Es importante terminar con una nota positiva, asegurando que el coachee se sienta motivado y claro sobre los pasos a seguir.

Cada uno de estos pasos es crucial para asegurar que la relación de coaching comience de manera sólida y que el coachee se sienta apoyado y entendido a lo largo del proceso

 

¿Cómo se siente el cliente después de una sesión de coaching?

Las reacciones y sentimientos de un cliente después de una sesión de coaching pueden variar ampliamente, dependiendo de la naturaleza de la sesión, los temas tratados y la personalidad del coachee. Sin embargo, aquí están algunas de las respuestas emocionales y mentales comunes que los clientes pueden experimentar:

1. Motivación y Energía

Muchos clientes se sienten motivados y energizados después de una sesión de coaching. Al tener una visión más clara de sus objetivos y los pasos necesarios para alcanzarlos, pueden sentirse renovados y listos para tomar acción.

2. Claridad y Enfoque

Una de las principales metas del coaching es proporcionar claridad y enfoque. Después de discutir sus situaciones y explorar diferentes perspectivas con su coach, los clientes a menudo salen de la sesión sintiéndose más claros acerca de lo que necesitan hacer y por qué es importante.

3. Alivio Emocional

El simple acto de hablar y ser escuchado por alguien que puede ofrecer una perspectiva objetiva y apoyo puede ser muy aliviador. Los clientes a menudo experimentan un sentido de alivio emocional después de compartir sus preocupaciones y desafíos en un entorno seguro.

4. Desafío e Incomodidad

No todas las emociones después de una sesión de coaching son positivas inicialmente. A veces, los clientes pueden sentirse desafiados o incluso incómodos, especialmente si la sesión ha traído a la superficie creencias limitantes o ha desafiado sus perspectivas habituales. Esto es normal y puede ser un signo de que están siendo empujados a crecer.

5. Confusión Temporal

En ocasiones, particularmente después de sesiones intensas o reveladoras, algunos clientes pueden sentirse un poco confundidos. Esto puede deberse a la cantidad de información nueva o a la reconsideración de sus creencias y comportamientos anteriores.

6. Esperanza y Positividad

El coaching a menudo proporciona esperanza y una perspectiva más positiva, especialmente para los clientes que pueden estar lidiando con situaciones difíciles. Ver posibles soluciones o diferentes enfoques para problemas antiguos puede ser muy esperanzador.

7. Mayor Autoconciencia

Los clientes con frecuencia emergen de una sesión de coaching con una mayor autoconciencia. Pueden aprender más sobre sus patrones de pensamiento y comportamiento, lo cual es fundamental para el desarrollo personal y profesional.

8. Empoderamiento

Finalmente, un resultado común es sentirse empoderado. Los clientes a menudo salen de una sesión de coaching sintiéndose más capacitados para tomar decisiones y actuar en conformidad con sus valores y metas.

Es importante para los coaches estar atentos a estas diversas reacciones y proporcionar apoyo continuo. Algunas emociones pueden necesitar ser abordadas en sesiones futuras, y es vital mantener una comunicación abierta para asegurar que el coachee se sienta apoyado a lo largo de todo el proceso de coaching.

 

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