“Cada especie es una obra maestra, una creación hecha con extremo cuidado y genio” (E. Wilson)

Pensé que era una exageración el informe que leí, donde hablaba de la existencia de 375.000 especies descritas de escarabajos, además de las subespecies y familias con lo que llegan a sobrepasar el millón. El escarabajo Hércules es el más grande, llegando a medir cerca de 20 cm. y menos de un milímetro el más pequeño, llamado S. Musawasensi encontrado en América Latina. Algunas especies formar plagas que devoran todo tipo de hojas, flores incluso madera, siendo muy perjudiciales. Habitan en toda la faz de la tierra y en diferentes climas según la especie. Los coleópteros, son la especie de escarabajos que se caracterizan por tener alas debajo de su dura caparazón e ingerir sus alimentos masticando.

Los coleópteros o escarabajos que se ven en esta foto, son un macho y una hembra de origen asiático muy queridos en Japón, especialmente el macho, por la fuerza que posee, se les llama Kabutomushi; Kabuto se traduce al español como casco y mushi como insecto, la hembra es más pequeña y no presenta los cuernos que diferencian al macho, el cual llega a medir entre 5 cm. y 8 cm. de largo. Salen de la tierra en el verano y se alimentan de la savia que sale de los árboles, pero a pesar de nacer tantos no se considera plaga porque mueren en el otoño, primero muere el macho después de haber apareado a muchas hembras y éstas mueren después de dejar sus huevos sobre la superficie de la tierra, estos huevos se convierten en gusanos escondiéndose bajo tierra, donde continuarán el proceso de su metamorfosis, hasta el verano del siguiente año.

Estos Kabutomushis no son dañinos ni destructores, no es necesario ir lejos para encontrarlos ya que también aparecen en los árboles que están dentro de la ciudad y para la gente es una costumbre tenerlos como mascotas. En las tiendas venden unas cajitas adecuadas para ese fin, a veces con las larvas incluidas, los padres consienten a sus hijos para que los críen, ya que es una manera de sensibilizarlos con otros seres de la naturaleza y ellos felices los cuidan y alimentan, siendo un éxito si las hembras ponen sus huevos dentro de las cajitas. Cada año es lo mismo, las personas de todas las edades gozan con ellos, pues organizan campeonatos, el más popular es donde enfrentan a dos machos iguales, colocándolos encima de un tronco de árbol cortado, o sea la superficie es plana y circular, y el Kabutomushi que saca a sus contrincantes de la superficie es el ganador y ninguno sale dañado, por lo que yo lo veo parecido al deporte del Sumo japonés.

“Hasta que uno no ha amado a un animal, una parte del alma sigue sin despertar” (Anatole France)

Aunque se sabe que la mayoría de personas no son aficionadas a cuidar insectos, creo que compartir algunas curiosidades de otras sociedades, es interesante especialmente para los niños. Pienso que los japoneses vieron el lado bueno de esta situación, si estos escarabajos no son perjudiciales y cohabitan entre la población por un tiempo corto, en vez de exterminarlos con potentes insecticidas, la población japonesa acepta esta realidad y comparten con ellos bonitos momentos. Así también nosotros podemos compartir con nuestros niños, el armar dos escarabajos en origami, un Kabutomushi y una Mariquita muy fácil de armar. El origami es un arte que desarrolla la concentración, la creatividad, ayuda a ejercitar la motricidad fina y muchos beneficios para quienes lo practican. ¡¡¡Manos a la obra!!!

Materiales para el Kabutomushi:

•  Dos láminas de papel del mismo color de 15cmx15cm, una para confeccionar el cuerpo y la otra para confeccionar las patitas del Kabutomushi
• Rotulador para pintar los ojos
• Pegamento para unir las patas al cuerpo. Cuando la goma seque doblar una vez más cada pata en dos, para hacerla más delgadas y formar el pie.

Materiales para el escarabajo Mariquita, en japonés de le llama Tentomushi:

• Una lámina de papel
• Perforador es para facilitar los círculos
• Pegamento, para pegar las alas al dorso del escarabajo. La cabeza se colocará hacia dentro del cuerpo para que su peso no impida que al final el Tentomushi pueda balancearse.
• Bolígrafo
• Tijeras

María Mizuno

Coach AICM Nº 12154

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