El término “Pet-Therapy” fue usado por primera vez en 1953 por el psicólogo Levinson al observar como su propio perro Jingles ejercía un efecto positivo en sus pacientes, inicialmente niños con autismo.
En España destaca la creación en 1987 de la Fundación Purina, con el objetivo de implementar programas de asistencia con animales en personas con autismo, discapacidades, inmunodeprimidos, mayores, reclusos y psiquiátricos.
En 1990 nace la Fundación Once del perro guía. Según la Fundación Affinity: “
La Intervención Asistida con Animales de Compañía (IAA) son intervenciones en las que un animal es incorporado como parte del tratamiento, con el objetivo directo de promover la mejoría en las funciones físicas, sociales, emocionales y cognitivas. Siempre deben estar dirigidas por profesionales de la salud o de la educación.”
Se clasifican en: Terapias Asistidas con Perros (TAP), Educación Asistida con Perros (EAP),
Intervención Social Asistida con Perros (ISAP) y Actividad Asistida con Perros (AAP).
Hay que distinguir entre perros de terapia (programa terapéutico o educativo), perros de servicio o asistencia (p.ej. perros guía) y perros de apoyo emocional.
En pacientes que se autoagreden, se ha observado como el perro logra con su interacción cesar la conducta.
Según el ejercicio de que se trate, potenciaremos unos u otros aspectos. En líneas generales podemos nombrar, entre otros, como beneficios:
- Potenciación del trabajo en equipo.
- Potenciación de la comunicación.
- Potenciación del autocontrol.
- Potenciación de la empatía y la autoestima.
- Mejorar la capacidad de frustración.
- Potenciar la coordinación motriz.
- Mejorar la memoria.
Así pues, nos encontramos ante unas intervenciones en las que se interactúa de manera física con el perro (coterapeuta), realizadas con grupos o con una persona sola y en las que el perro sirve como catalizador de comunicación, apoyo emocional y ayuda para expresar sentimientos.
Las sesiones suelen tener una duración de 45 minutos y se trabaja con perros entrenados para tal fin.
Sobra decir que en todo momento se respetará al animal y se velará por su bienestar y que es un miembro pleno del equipo de trabajo.