“Perdonar no cambia el pasado, pero sí el futuro” (Anónimo).
Ahora que todo vuelve a la “normalidad”, vuelve también el virus, no debemos bajar la guardia, es la recomendación que las autoridades sanitarias piden, ni fuera de casa ni dentro de ella; es aprender a vivir de otra manera y aceptar que las cosas han cambiado, si antes un catarro pasaba en siete días con o sin medicina, el nuevo catarro que ahora se llama Covid-19, dos días es suficiente para que nuestra vida se complique, recordemos las indicaciones de la Dra. María Eugenia Barrientos del país de El Salvador: “primero es una gripe, enseguida hay que cortarla con un antigripal, para parar la tos, evitar la inflamación y la propagación del virus”… escribía este párrafo y me di cuenta que había cometido un error en el artículo que escribí el 17 de Junio con el nombre “Donde está el final” y donde
menciono a la Dr. Barrientos a quien admiro por sus muestras de humanidad, mi error fue decir que la Dra. era del país de Honduras, cuando en realidad ella es del país de El Salvador y es aquí que ofrezco mis disculpas a los lectores de este prestigioso blog de AICM y si por este error pudo verse afectada la sensibilidad de alguna persona. Esta situación me hizo pensar en que palabra sería más adecuada de utilizar, “disculpa o perdón” y busqué información, encontrando variedad de opiniones, algunos decían que era lo mismo, porque las dos palabras tratan de reparar una situación, pero entre tantas encontré una explicación muy clara en una entrevista que le hacían al Monseñor Jorge de los Santos Vicario en la ciudad de Denver de los Estados Unidos, donde él explica que, la disculpa no se pide, se ofrece, por haber cometido un error del cual no se era consciente en el momento del suceso, pero al reconocer el error es bueno ofrecer una disculpa, porque esa actitud traerá paz interior a las dos partes. Errores cometemos todos a cada momento, solo que en algunas culturas lo pequeño pasa desapercibido, en otras culturas por los pequeños errores del día a día se ofrecen disculpas, como en la cultura japonesa, en la que a cada momento se escucha la palabra “gomenasai” que su traducción al español es: “tienes que disculparme”.
Referente al perdón, esta palabra se utiliza cuando la persona aun siendo consciente del daño que puede ocasionar, realiza la acción contra otra persona, pero luego siente arrepentimiento, entonces pide perdón, lo cual será un acto de valentía por reconocer su error y vencer su propio orgullo, porque tiene que esperar que la persona afectada, decida si lo perdona o no. El pedir perdón u ofrecer una disculpa cuando son sinceras, fortalecen los vínculos entre las personas.
“Pedir perdón no es humillarse, es reconocer que hemos fallado” (Anónimo)
Para conectar con los niños y hablarles de estas buenas actitudes, los invito a realizar la figura de una japonesa en origami, que es el arte de armar figuras en papel, siguiendo el trazado de las líneas marcadas al doblar y desdoblar; esta técnica se emplea para favorecer el desarrollo de la motricidad fina, tan necesaria para el aprendizaje de la escritura, además de desarrollar la concentración, la creatividad y pasar unos momentos agradables al ver los logros alcanzados, esta figura se puede usar como un marca-páginas o en la decoración de una tarjeta, para estos objetivos es necesaria la guía de una persona mayor que facilite el trabajo, mientras se les habla de la importancia de decir: te ofrezco una disculpa.
Materiales: Se puede emplear el papel que deseen y decorarlo a su gusto.
- 1 trozo de cartulina 4×2.5 cm., para dibujar la cara y el cuello, se pinta el pelo por los 2 lados, luego se recorta la forma. El cuello queda en 2×0.6mm, la cara de 1cm y el pelo de 1cm. aproximadamente.
- 1 lamina de papel de 15x9cm. (kimono)
- 1 trozo de 7×2 cm. (cuello)
- 1 trozo de 7.5 x 4 cm. (cinturón)
- 1 trozo de 9.5 x 2.5 cm. (entretela)
- 1 trozo de 7 X 3.5 cm. (accesorio de la espalda)
- 1 trozo de 5 x 2 cm. (tocado, generalmente se usa peluche blanco, cuando es invierno.
- Rotulador para pintar el pelo, las facciones y el decorado
- Goma
- Tijeras
María Mizuno
Coach AICM Nº 12154
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